Y como no….este curso también llega a su fin.
Han sido dos meses repletos de información sobre del TDAH, información
y conocimientos que nunca había tenido hasta entonces.
Eran tantas las dudas que rondaban por mi cabeza acerca de
este trastorno que el comenzar este curso creó en mi cierta incertidumbre.
Incertidumbre por saber si iba a ser capaz de realizar correctamente todas y
cada una de las actividades que este
curso planteaba; no sólo porque no contaba con muchos conocimientos sobre el
TDAH, si no porque las tareas había que resolverlas mediante las nuevas
tecnologías (y he de decir que mis habilidades en ese ámbito son más bien
escasas).
Pero ahora que ha llegado a su fin puedo decir que me ha
sido de gran ayuda y me he podido dar cuenta de la gran importancia que tiene conocer en profundidad este trastorno para tratar a estos alumnos correctamente y asegurar así una vida académica fructífera.
Probablemente no sea una especialista en el tema, pero si en cualquier momento de mi vida profesional se me presenta un alumno
con TDAH, al menos sabré cómo actuar, por dónde empezar y qué medidas tomar; y sobre todo, mi respuesta ante “¿qué sabes sobre este trastorno?” no será un
simple “son alumnos muy movidos".
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